Una crónica que salvó mi semestre!!!

domingo, 1 de agosto de 2010

Espero que la disfruten tanto o más que mi prof de Informativo IV!!! jajajajajajaja!!!
Saludos!!!



Recordar siempre es bueno

Hermanos Gasparini alimentan la memoria fotográfica del venezolano

“La fotografia de arquitectura no se refiere de modo concreto al espacio, sino a lo que hay en él” Germán Téllez

Silencio. Esa es la palabra que mejor define a una Galería de Arte. Este siempre será uno de sus atributos principales. El silencio es primordial para poder apreciar detalladamente todas y cada una de las obras que en ella se expone y, si bien es cierto, muchas de ellas gritan lo que poseen, otras son un poco más discretas y prefieren que pasen horas intentando descifrar sus más ocultos significados.
Tal es el caso de la muestra “2 x Gasparini, Dos miradas a la Arquitectura Venezolana”, muchas obras hablan y otras solo exigen admiración y memoria. Al entrar a la sala el choque es inminente, venir de transitar la Av. Principal de Las Mercedes –donde el humo, las cornetas, y el stress no se hacen esperar- al sótano del Centro Comercial Paseo Las Mercedes - donde cada esquina derrocha tranquilidad, arte, paciencia y glamour- es algo bien complejo. El espacio es bien agradable, aire acondicionado luces por doquier, piso de parquet, paredes increíblemente blancas rotuladas con los nombres de las obras en negro, un par de “pie de amigo” con dos líneas de alambre recubiertas en plástico, agarradas con un ramplus y perfectamente tensadas que permiten ser la vitrina de una gran exposición de fotos en blanco y negro que, reposadas en láminas blancas o negras dependiendo la zona, que permiten resaltar el trabajo tan cuidado y elaborado que presentan las fotografías expuestas.
La exposición comienza con la explicación del origen de los hermanos Gasparini –italiano obviamente- quienes vinieron al país a resaltar lo grandioso de la arquitectura de los años 50, 60, 70 que se desarrollaba en el país. Más de 5 paredes con las mejores fotos así lo confirmaban.
Las imágenes eran un sueño, era una Venezuela que había existido pero que poco a poco la habían destruido para dar paso a este gran conglomerado de edificios, pocas áreas verdes y caos en exceso, una completa selva de concreto. Mérida, Sucre, Guárico, Falcón y Caracas fueron algunos de los estados visitados por estos hermanos. La fotografía era impecable, siempre resaltando lo que a simple vista no se puede ver. Era más que 4 paredes o una acera o una esquina, era esa maravilla venezolana de adornar todo, de poder sacar una venta de cualquier perolito que salga, es ese calor familiar, esa felicidad que muchas veces se siente más no se expresa, esa identidad nacional y criolla que todos pueden derrochar.
La exposición presenta el lado más natural de Los Taques, Punta Cardón, Adícora, Cumanacoa, Villa Marina, Paraguaná, Quibor, Carora, Zulia, Pueblo Nuevo, siempre reflejando la arquitectura más que los paisajes o los personajes que habitan en ella. Las casas eran sencillas, sin muchas cosas alrededor, simplemente 4 paredes, un techo, pero todo construido de manera tal que en vez de ser una casa fuese una perfecta obra arquitectónica digna de admiración.
Caracas no podía quedarse fuera. Esta vez los marcos eran negros, pero las fotografías seguían siendo impecables. En esta oportunidad mostraban un poco más de la ciudad, como era en los años 60 y 70, lo magistral de sus calles y sus pocos edificios. Caracas no estaba tan invadida de edificios como está ahora, las áreas verdes rodeaban la capital y el caos no era la primera opción, imposible pensar en colas en esa época. El 23 de Enero eran solo un par de edificios, San Agustín del Sur era una urbanización muy modesta y muy pequeña –hoy en día es una barriada súper grande- Catia, El Silencio, Petare, el Distribuidor La Araña recién construido, El Helicoide, la Av. Bolívar, Colinas de Bello Monte y hasta la Av. Francisco de Miranda son algunas de las zonas capitalinas reflejadas en la exposición. En pleno siglo XXI es increíble y hasta insólito pensar que Caracas algún día fue así. Esta muestra es lo más parecido a un reto a la memoria para algunos y una gran clase de cultura general para los más jóvenes.